En el arandel

Calle Martín Cerezo (a la izquierda) y Calle Santa Gertrudis (a la derecha)
Lo primero, puede que extrañe el título. La palabra arandel o su plural, arandeles, no son reconocidas por el DRAE. Sin embargo, en Cáceres la expresión "En el arandel" es entendida por una gran mayoría de sus habitantes. Veamos algunos ejemplos de su uso:
"...mirando a nuestra derecha encontramos un arandel, esa solución constructiva tan cacereña, que permite suavizar los desniveles del irregular terreno y facilitar el acceso a vías situadas a diferente altura. Suelen ser construcciones en sillarejo o mampuesto..."
Francis Acedo: Paseo por la eternidad. El arandel y la Corredera.
El Periódico Extremadura, 26-03-2006
"...los miembros de la Comisión de Ornato –[...]– se encargaron de recoger las necesidades que el nuevo edificio debía cubrir, destacando, por ejemplo, la mejora de los accesos, abriendo entrada por los Adarves y las Piñuelas, así como plantearon la eliminación del Arandel que existía delante de él..."
Y en nota a pie de página aclara: "...Según recoge Vicente Maestre en el manuscrito anteriormente citado, se conocía como Arandel «una pared que existía delante de las casas del Ayuntamiento y parte del atrio del corregidor..." (la autora hace referencia a hechos ocurridos en el s. XIX).
Mª Jesús Teixidó Domínguez:  
Las antiguas casas consistoriales de Cáceres y su desaparición.
NORBA-ARTE, ISSN 0213-2214, vol. XXVII (2007) / 169-189  
 "Su tío, Vicente Palomar, era dueño de una empresa de arrieros que cubrían la ruta de Cáceres a Sevilla, fue varias veces concejal del Ayuntamiento y, en 1819, obtuvo la concesión para construir una serie de locales comerciales bajo el arandel que iba desde el Atrio del Corregidor a la subida de las Piñuelas, por delante de las antiguas consistoriales, a cambio de fabricar por su cuenta un templete sobre la Torre de Bujaco donde se colocó la estatua del Genio Andrógino (conocida erróneamente como la Diosa Ceres), que estaba emplazada en el citado Atrio del Corregidor (P. HURTADO: Ayuntamiento...op. cit., pp. 622-623)"
Rodríguez González, Antonio y Martín Pulido, Cecilia.
Proyecto para reparar y fortificar la muralla de Cáceres en 1837: 
documento inédito del Archivo Histórico Municipal.
Coloquios Históricos de Extremadura. Trujillo, 2013.
"La calle Margallo o Moros, más larga que un día sin pan, se estiraba desperezadamente hasta El Arandel, que convergía con el término de la entonces calle José Antonio, a la altura del Perejil, donde había un puesto de chucherías de la tía María y del tío Enrique,..."
El Blog de Juan de la Cruz Gutiérrez.
Noche de Soledad en mi calle Margallo, también Moros.
Región Digital.com 06-07-2015 

Sea como fuere, aceptadas o no estas palabras, la verdad es que algunos de los recuerdos de mis primeros años en Cáceres son los muchos momentos que pasábamos cada día sentados en el arandel los amigos de la calle Martín Cerezo (entonces llamada Santa Gertrudis Alta). Era un murete que separaba, avanzando desde el chaflán de una casa, las dos calles de Santa Gertrudis, la alta y la baja. En/sobre/desde el arandel, con los pies colgando hacia la zona más baja, comenzábamos a ver pasar la vida. A veces pienso que aún sigo sentado en ese arandel.
Nota: En la foto de arriba se puede observar que el arandel ha desaparecido. Avanzaba desde la escalera hacia el espectador formando un murete de separación entre las dos calles citadas.

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